San Luis Potosí, SLP.- Una llamada al 911 movilizó a policías municipales, estatales, metropolitanos, ministeriales, peritos, ministerios públicos, SEMELE, y curiosos, pues se alertaba de una tumba clandestina en Peñasco.
De inmediato arribaron los policías y acordonaron la zona. Cuando los peritos intervinieron descubrieron la osamenta era huesos de gato, por lo que todo regresó a la calma, pues pensaban que era otro muerto más en la capital potosina.
Pocas veces las policías reaccionan tan de rápida manera, escasas veces atienden todos juntos a un llamado al 911 y hoy que lo hicieron, aunque todo terminó en una FALSA ALARMA.